Cada 1 de diciembre, en todo el mundo se conmemora el Día Mundial del Sida. El lema de este año: Poner fin a las desigualdades, poner fin al Sida, poner fin a las pandemias. Este lema es toda una lista de desafíos sobre los que el Día Mundial del Sida ha alertado en todo el mundo.

El Ministro de Sanidad y Bienestar Social, Diosdado Nsue Milán, comenzaba diciendo que en este día personas de todo el mundo se unen para apoyar a los enfermos de VIH y recordar a los que han fallecido por enfermedades relacionadas.

Establecido en 1988, este día fue el primero dedicado a la salud en todo el mundo. Desde entonces, los gobiernos, las Agencias de las Naciones Unidas y la sociedad civil se reúnen cada año para concentrar sus intervenciones en determinadas áreas relacionadas con el sida.

Se llevan a cabo en todo el mundo actividades de concienciación, se acostumbra a usar un lazo rojo, que es el símbolo universal que muestra el apoyo y la solidaridad para con las personas que viven con el VIH. Y las personas que viven con el VIH escogen ese día para alzar la voz y hacerse oír. Muchos grupos de personas que viven con el VIH y otras muchas organizaciones de la sociedad civil implicadas en la respuesta al sida se movilizan en apoyo de fondos para las personas enfermas. Las actividades que se realizan ponen de manifiesto el estado actual de la epidemia.

El Día Mundial del Sida sigue siendo tan importante hoy como cuando se empezó, y continua recordando a la sociedad y a los Gobiernos que el VIH no ha desaparecido. Al día de hoy es fundamental aumentar la financiación para la respuesta al sida. También es esencial que la sociedad en su conjunto tome conciencia de como el VIH afecta la vida de las personas, para que de este modo podamos poner fin al estigma y a la discriminación, y conseguir mejorar la calidad de vida de las personas enfermas.

En referencia a las estadísticas en el mundo, 37.700.000 personas tenían el VIH en 2020; 680.000 personas murieron por causas relacionadas con el VIH en año 2020; 1.500.000 personas se infectaron en año 2020 y el 73% de adultos con el VIH estaban en tratamiento antirretroviral de por vida en año 2020.

En la República de Guinea Ecuatorial alrededor de 62.300 personas están infectadas de VIH. Más de 25.000 personas están bajo tratamiento con antirretrovirales, se ofrece de carácter gratuito la prevención de la transmisión de VIH de la madre al hijo a todas las mujeres embarazadas seropositivas, de la misma manera se da la leche artificial a todas las mujeres seropositivas para los recién nacidos; los medicamentos antirretrovirales son gratuitos para todas las personas que viven en la República de Guinea Ecuatorial que lo necesiten; las pruebas rápidas de detección de los anticuerpos de VIH y las pruebas de seguimientos de los pacientes también son gratuitos.

Por otra parte, el ministro señalaba que el VIH sigue siendo un importante problema de salud pública que afecta a millones de personas en todo el mundo. Si bien se han registrado progresos significativos en las últimas décadas, no se han logrado importantes metas mundiales previstas para el 2020.

La división, la disparidad y el desprecio por los derechos humanos son algunos de los problemas que permitieron que el VIH se convirtiera en una crisis sanitaria mundial y que lo siga siendo, ahora, cuando la Covid-19 está agravando las desigualdades y las perturbaciones de los servicios, de modo que la vida de muchas personas con VIH es más difícil.

El ministro concluía haciendo un llamamiento a tomar conciencia: “no es problema de quienes lo padecen, es de todos porque si uno no está infectado estará afectado”.

Texto y fotos: Sarilusi Tarifa King (DGPEPWIG)
Oficina de Información y Prensa de Guinea Ecuatorial

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