A partir del viernes 30 de octubre, debido a la violenta segunda ola de contagios por coronavirus registrados en los hospitales, el Gobierno francés ha decidido un confinamiento en todo el territorio nacional.

Cuatro meses ha durado la tregua del nuevo coronavirus en Francia, desde el 14 de junio hasta la noche del 28 de octubre, cuando el Presidente francés, S.E. Emmanuel Macron, anunciaba en un discurso a la nación, un confinamiento en todo el territorio nacional que entrará en vigor a partir de la media noche de este viernes.

La curva de contagios por coronavirus que se mantenía plana desde el mes de julio ha superado el record de los 50.000 nuevos casos diarios en las últimas semanas, los hospitales vuelven a saturarse y el Gobierno ha reaccionado con un cierre del país en un intento por frenar la propagación de la segunda ola que está resultando más mortífera que la primera.

Esta vez las escuelas, fábricas, explotaciones agrícolas, las obras públicas y la administración en general seguirán funcionando. En cambio el sector terciario y otros servicios no esenciales como bares, restaurantes, museos y otros establecimientos con atención al público permanecerán cerrados. Las salidas a la calle quedan igualmente restringidas, excepto por motivos imperativos de salud, compras, trabajo o hacer ejercicio; este paquete de medidas exige autorización con una declaración jurada. También serán obligatorias pruebas rápidas de COVID-19 para todas las llegadas al territorio francés.

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Oficina de Información y Prensa de Guinea Ecuatorial

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