Se estrena en España una película sobre Copito de Nieve
El pasado 23 de diciembre se estrenó en España una película de animación, “Copito de Nieve”, basada en la vida del gorila albino más famoso del mundo. Tras su captura en 1966, fue trasladado al Zoo de Barcelona donde vivió hasta su muerte en 2003. Durante todos esos años fue el símbolo y la atracción del centro, convirtiéndose en un auténtico mito.
Debería haber pasado a la historia con el nombre de Nfumu Ngui (gorila blanco), nombre con el que lo bautizaron los cazadores fang que lo capturaron en la selva ecuatoguineana de Nko en 1966, pero a su llegada a España fue rebautizado como Copito de Nieve. Llevado a la portada del National Geographic, enseguida se convirtió en el gorila más famoso del mundo, incluso equiparable al mítico King Kong del celuloide. La fama de Copito trascendió fronteras y su piel blanca, única en el mundo, fue la envidia de todos los zoológicos del planeta.
Por tanto, no era de extrañar que la azarosa vida de este primate singular fuera llevada a la pantalla. Aunque la película, que acaba de ser presentada, no es exactamente una biografía -porque eso daría para un auténtico documental-, la emocionante historia de animación y aventuras del gorila albino está convocando, durante la Navidad, a multitud de niños en las salas de los cines españoles, que disfrutan con el personaje animado, creado por el cineasta Andrés G. Schaer y los guionistas Albert Val y Amelia Mora.
La historia que cuenta la película arranca con la llegada del gorila a Barcelona. Ahí comienza esta ficción llena de emoción y ternura: “Copito de Nieve es único en su género, su piel blanca le hace diferente a todos los demás gorilas del Zoo de Barcelona. El ser distinto provoca el rechazo de los demás primates que no le aceptan como uno de los suyos”.
Por dar un breve esbozo de la historia de este gran primate, recordemos que, tras su captura, unos cazadores se lo vendieron por unas 15.000 pesetas al profesor catalán Jordi Sabater, entonces conservador del Centro de Experimentación Zoológica de Ikunde del Ayuntamiento de Barcelona, una dependencia del zoo de esa ciudad. En su larga vida en el zoo, Copito tuvo 22 hijos, de los que sobrevivieron cinco (un macho y cuatro hembras) y siete nietos (tres machos y cuatro hembras). Ninguno de ellos fue albino. Murió el 24 de noviembre de 2003 debido a un cáncer de piel que le venía provocando problemas de salud desde 1996. Se estima que tenía unos 39 años cuando falleció.
Oficina de Información y Prensa de Guinea Ecuatorial.